Sin duda alguna lucen frente a la catedral y es un gran espectáculo cuando vuelan de un lado a otro para pararse en parte de la fachada pero…, su excremento es muy dañino para la cantera del edificio, en lo cual ya se puede observar el deterioro que ha ido sufriendo a través del tiempo, en algunas partes a los edificios los cubren con una malla especial, y así ya no se paran , en la capital potosina, las torres están protegidas, quizás quitan algo de la belleza de la obra pero dura más para las futuras generaciones